Alicia Moreau de Justo
Médica y política – Londres, Reino Unido, 11 de octubre de 1885 – Buenos Aires, Argentina, 12 de mayo de 1986
Alicia Moreau de Justo, nacida en Londres el 11 de octubre de 1885 y fallecida en Buenos Aires el 12 de mayo de 1986, destacó como médica y política argentina, siendo una figura prominente del feminismo y el socialismo. Desde principios del siglo XX, se involucró en la lucha por los derechos de las mujeres, fundando en 1902 el Centro Socialista Feminista y la Unión Gremial Femenina. Además, se destacó por organizar conferencias, colaborar en periódicos y participar en iniciativas sociales.
En 1914, se graduó como médica y se unió al Partido Socialista, posteriormente casándose con el político Juan B. Justo, con quien tuvo tres hijos. Tras la muerte de su esposo en 1928, continuó su activismo político y feminista, fundando en 1918 la Unión Feminista Nacional. Abogó incansablemente por el sufragio femenino, los derechos laborales, la salud y la educación pública, presentando incluso un proyecto de ley en 1932 para el sufragio femenino.
Su compromiso político se mantuvo hasta su muerte en 1986, a la edad de 100 años. Durante su vida, participó activamente en la lucha contra la dictadura militar, defendió los derechos de las mujeres y fue una figura relevante en la formación del Partido Socialista Argentino en 1958. Permaneció como una voz influyente en la política argentina, dejando un legado duradero en la lucha por la igualdad y la justicia social.
Un recorrido a través de
Imágenes y Momentos
Alicia Moreau de Justo.
«El verdadero poder consiste en saber que sí se puede, pero no se quiere».
Fotografía del año 1910.
Alicia Moreau de Justo.
Una mujer luchadora y vanguardista. «Recuerden… Que los verdaderos derechos se deben conquistar, que es necesario vencer los conservadores, rutinarios retrógrados, los temerosos de lo nuevo, los amantes del pasado, que es necesario vencer el temor de los políticos que ven con recelo esa incógnita que encierra el voto femenino (y tal vez sea éste el mayor obstáculo)».
Alicia Moreau de Justo.
«Cuando llegué al país, no caminaba; como digo siempre, tuve mucho gusto de aprender a caminar sobre esta tierra de la que nunca me separé.»
Alicia Moreau de Justo
«Siempre creí que este país merecía ser distinto. Recuerdo los barrios obreros de esta ciudad cuando llegábamos con las banderas rojas, y la gente se iba reuniendo y se iban logrando cosas. Cuando el Partido Socialista era una parte linda de la vida. Cuando las mujeres nos juntamos por primera vez y empezamos a pelear por nosotras…»
Alicia Moreau de Justo
«Un partido que es capaz de autocriticarse muestra que se mantiene despierto.»
Fotografía durante una marcha contra la violencia de género, 1986.
Alicia Moreau de Justo.
Una de las pioneras en la Facultad de Medicina de la UBA buscando desafiar esas las ideas de que las mujeres tenían una inferioridad biológica constitutiva.
Biografía
Destacada tanto en el ámbito del feminismo como del socialismo argentino, Alicia Moreau de Justo se sumergió en la lucha por los derechos de las mujeres desde los albores del siglo XX. En 1902, estableció el Centro Socialista Feminista y la Unión Gremial Femenina, marcando el inicio de una carrera dedicada a la promoción de la igualdad de género. A pesar de las adversidades sociales que enfrentaba la educación universitaria femenina en ese entonces, completó sus estudios de medicina en la Universidad de Buenos Aires en 1914, mientras trabajaba activamente en el Hospital de Clínicas, proporcionando atención médica gratuita a mujeres de escasos recursos.
Además de su destacada labor médica, Moreau de Justo fue una prolífica escritora y activista política. Desde 1906 hasta 1914, contribuyó con numerosos artículos sobre educación y política en la Revista Socialista Internacional. En colaboración con su padre y Berta W. de Gerchunoff, fundó el Ateneo Popular en 1910, con el propósito de fomentar la expansión de la educación secundaria y universitaria. En 1920, desempeñó un papel crucial en la creación de la Unión Feminista Nacional (UFN), con el objetivo de unificar los esfuerzos de diversas organizaciones feministas.
Su compromiso político se consolidó con su adhesión al Partido Socialista en 1921, momento en el que comenzó a destacarse como defensora incansable de los derechos de las mujeres, especialmente en lo referente al sufragio femenino y los derechos laborales. A lo largo de su vida, presentó proyectos de ley y lideró iniciativas para avanzar en la causa feminista. Aunque su legado trascendió su muerte en 1986, su centenario en 1985 fue un momento especial de reconocimiento a su dedicación y lucha infatigable por la igualdad de género en Argentina.